13. Alejandro Tarrab + Kevin Martínez

INCISIÓN (Fragmento):

tenue     el demonio cruza nuestros labios

tenue      el demonio roza el frío

tenue      desde un apartadero

cruza      traspasa el viento nuestra boca

es el metal de cristo      dices

el cuerpo simple de una rosa
un soplo simple    tóxico
el llanto rojo   rojo  dices

           
               límpiame dios de todo-cielos
               guárdame en ti como el cuerpo vertebrado de las olas
               lávame en la cordillera de mi cuerpo en ruinas
               elévame a la altura de los cielos que cambian
               aunque la mirada no dé cuenta
               afírmame en el mercurio de la hora genuina
               señor        mi dios      límpiame el llanto de esta historia consagrada
               guárdame turbio y albo
               crúzame como un demente en la edad de las estrellas
               cólmame en el vientre de los ateridos
               devástame en la risa intacta que presumen las alturas
               inyéctame el cáliz de los espacios
               constélame señor
               turbio como la caída de este mes enfermo
               desnudo como diego de santo tomás o la virgen

     
                 turbio como el lenguaje de mi frente
                 oscuro y desvanecido como la hierba de las consonantes
                 y la columna denuda     la raíz de mi vientre
                 se yergue hacia el torrente de los astros

tenue    cruza el demonio nuestros labios
tenue    como la rosa consagrada

(TUNEADO)

Parece que una constante en esta vida
cruza nuestros labios, 
posiblemente
sea el cuerpo simple,
porque parece que una constante en esta vida
sea el llanto rojo,
posiblemente
sea,
dices,
el cuerpo

 en ruinas.

   Llanto divorciado,
               apartadero
hacia un hospital general y estricto.

      Demonio aspiradora,


límpiame el vientre,
el líquido amarillo de una mujer parapléjica,
el llanto,
devástame,
guárdame en ti.

     Límpiame señor los problemas pulmonares,
el sudor del suéter verde de secundaria
que huele
a simple tóxico.

¿Acaso no es cansado medir la urticaria y las consonantes en una balanza?

una boca lenta succiona  las olas,
la edad de las estrellas,

y la columna,
la risa intacta
se escapa del cactus,

cruza  el torrente de los astros-vértebras
cruza  el demonio la Alameda Central
aún con yagas,

cuerpo en ruinas

Verte        colgado
degustar los labios como un diantre.
Verte      mes enfermo
 venir del llanto.

Porque parece que una constante en esta vida,
posiblemente sea               historia consagrada.